La dignificación del flamenco se logra de diversas maneras. Algunos pretenden disfrazar el arte jondo de novedad para alcanzar la comercialmente ansiada globalización, vestir lo que ven como “el mono” de seda, un ejercicio de marqueting que logra su objetivo con distintos grados de éxito.
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Otros, los grandes artistas, conocen bien los códigos, representan la estética flamenca a través de una visión personal y se basan en su propia creatividad, capacidad y conocimientos para contribuir a la evolución de un género universalmente respetado. Este último camino es más arduo y accidentado, pero a veces el gran público reacciona.
 El jueves, día 22 de noviembre, dos artistas admirados desde hace años por la afición, han sido reconocidos en el más alto nivel público del país. Manuela Carrasco (Sevilla, 1958) bailaora, y Miguel Poveda (Badalona, 1973), cantaor, han sido nombrados Premio Nacional de Danza y Premio Nacional de Música respectivamente, y el flamenco está de celebración. Son dos artistas que representan los mejores y más diversos aspectos del flamenco. Manuela Carrasco, faraónica, profunda, básica, abanderada del baile más tradicional a la vez que actual. Andaluza. Miguel Poveda, creativo, estudioso, versátil, representativo de lo mejor del flamenco contemporáneo. Catalán. Entre los dos dan fe de la admirable capacidad del flamenco de adaptarse a una extraordinaria diversidad de conceptos sin apartarse de los cánones. Es la grandeza de este género que tiene tan fascinado al mundo entero desde hace décadas.
Los premios dotados con 30.000 euros cada uno, han sido fallados hoy por un jurado presidido por Juan Carlos Marset, director del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (INAEM), organismo a través del cual se otorgan estos galardones en nombre del Ministerio de Cultura. Del jurado del Premio Nacional de Música han formado parte la subdirectora general de Música y Danza del INAEM, María Luisa Manchado, José Manuel Berea, Pilar Jurado, Remedios Navarro, Félix Palomero, Inmaculada Tomás y los ganadores del año pasado. Rosa Torres, consejera de Cultura de la Junta de Andalucía ha felicitado a los artistas, “dos de los máximos exponentes del flamenco actual” destacando el “buen momento que vive el flamenco”. Hablando de Miguel Poveda, afirmó que es un artista “llamado a dejar huella en la historia del arte flamenco”. Bibiana Aído, directora de la Agencia Andaluza de Flamenco, señaló que los premios “son un reconocimiento a estos dos grandiosos artistas y a todo el trabajo y el sacrificio que llevan a sus espaldas”. |
