La redacción de Deflamenco ha recibido la siguiente carta escrita por Enrique Morente y secundada por numerosos artistas, con la solicitud de que se publique.
DeFlamenco.com decide su publicación y considera que los artistas tienen su derecho a exponer sus opiniones frente a la critica, como así lo hizo recientemente publicando una carta del manager de Arcángel (Toni García) respecto a la critica realizada en nuestra revista del espectáculo Zambra 5.1 estrenado en Málaga en Flamenco.
Aunque esta carta va dirigida al crítico Manuel Martín Martín del diario El Mundo, ante la negativa de su publicación por parte de su diario y por los numerosos e importantes nombres del mundo del flamenco que secundan la misma, creemos que deja de ser una carta personal y estimamos que debe ser publicada.
PARA QUE BAILE MARTÍN
Me veo animado y contento de poder hacer una crítica sobre la crítica que hoy existe en el flamenco. Sin generalizar, y aunque la cosa ha mejorado muchísimo, el nivel de crítica durante años ha sido muy desafortunado y mediocre.
Pero hoy quiero referirme especialmente al crítico Martín Martín Martín. Digo lo de animado y contento porque después de llevar este señor y algunos otros durante 15 ó 20 años intentando destruirme, hoy día veo con alegría, risas y regocijos que él y otros parecidos a él no han podido conmigo.
He comprobado en esta bienal (Málaga en Flamenco 2007) que continúa con su precioso estilo literario…
Naturalmente, un crítico tiene el derecho, por la libertad de expresión (ley que yo aplaudo y, como demócrata, defiendo), y la obligación de decir lo que piensa sobre una obra de arte, sobre un espectáculo o una actuación. A lo que no tiene derecho es a convertir su crítica y sus escritos en un atropello lleno de insultos, de ofensas, de difamaciones, de un vocabulario indigno de cualquier persona que estime la libertad de expresión y la literatura. No se debe levantar calumnias, ofender a gente joven que está empezando, cuando lo que tiene que hacer es estimularlos y animarlos, independientemente de hacerles la crítica, a ser posible constructiva. Y también a ser posible, usted que sabe tanto… decirles qué tienen que hacer y cómo lo tienen que hacer.
Eso debería saberlo si hubiese asimilado algo de lo que debe ser el respeto y la convivencia dentro del mundo de la cultura y el arte. Porque, cuando hace una crítica, parece que está usted hablando de Irak, de Pakistán, de Gescartera o de la Operación Malaya. Otras veces da la impresión de que está usted utilizando la escuela del estilo político que existe hoy, que es la idea de difamar y destruir al contrario para conseguir más votos.
Usted no va a conseguir mejor puesto dentro del mundo del periodismo porque usted no tiene nada que ver con lo que se supone que es la honradez de un crítico dentro de la libertad de expresión. Con lo cual su analfabetismo y su ignorancia acompañan a su presuntuosidad y a su postura agresiva y fascista.
Mire usted, hablar de arte no es llamar ladrón a todo el que se sube a un escenario. En tiempos anteriores las quejas eran continuas con lo poco que se ayudaba al flamenco y ahora, si algunos jóvenes han recibido una subvención de ayuda para montar una idea artística, les llama usted mangones. ¿En qué quedamos?, ¿son ladrones si piden ayuda? o ¿ cual es la postura según usted?…. Los artistas, aunque usted no lo crea, cuando suben a un escenario, muchos días y a veces muchos meses antes, han sufrido muchas pesadillas, han trabajado muchísimas horas, han puesto muchísimas ilusiones para que un crítico se permita constantemente agredirlos y ofenderlos (y siempre a los mismos además). Si sabe usted tanto, señor M.M.M., ¿ por qué no le dice usted cómo tienen que hacerlo, sobre todo a los jóvenes?
Trate usted de entender que el flamenco es una música de todos no de usted y sus preferidos. Usted no puede insultar a los jóvenes y viejos artistas que no son gitanos, no los insulte usted llamándoles payos. Ellos son más respetuosos que usted con el arte gitano, que también es de todos. Los jóvenes se acordarán de usted como un racista fascista.
Se permite usted difamar y acusar de mangones (usted sabe muy bien que en el argot flamenco mangón quiere decir ladrón): eso es lo que usted ha llamado a la mayoría de los artistas que han actuado en la bienal de Málaga. ¿Quién cree usted que es más mangón y más ladrón: el artista que se ha entregado durante meses antes, mañana y tarde, y ha puesto todo lo que tenía hasta que llega ese momento de subir al escenario, o el individuo que se ofrece a través de una agencia él mismo para presentar espectáculos flamencos y al día siguiente utiliza el periódico donde escribe, y hace de juez y parte, permitiéndose hacer la crítica de ese mismo espectáculo? ¿Usted no comprende, señor M.M.M., que si usted es contratado para hacer de presentador, y sale usted al escenario, a partir de ese momento es un intérprete de ese espectáculo y es usted quien debe de ser criticado? Mire usted, por delitos menos graves hay gente en la cárcel. Y de la forma que usted lo hace, más que criticado debería ser juzgado en los tribunales.
De todas formas, señor M.M.M, dentro de unos años por ley de la naturaleza usted habrá desaparecido junto con su crítica y su bigote y todavía vivirán los jóvenes a los que usted ha difamado, insultado y ofendido, y que saben muy bien que lo ha hecho usted con los flamencos jóvenes que no pertenecen al mundo agresivo. A muchos de ellos los ha destruido moralmente. A Naranjito de Triana lo destrozó usted. Se retiró de la profesión por culpa de ¨sus lindos comentarios¨. Y aunque usted no lo crea, ( porque usted tiene el oído donde el bigote…), Naranjito ha sido uno de los grandes cantaores que ha tenido Sevilla. Les he tendido mi mano a todos ellos para decirles que no se preocupen, que su postura de ordinariez nunca podrá con el arte sincero de la juventud. Pues todos estos jóvenes lo recordarán a usted como un personaje siniestro y se reirán de usted porque, de todas formas, el que sea artista lo va a ser diga usted lo que diga, escriba usted lo que escriba y se ponga usted como se ponga.
Sus atrevimientos han llegado hasta el colmo de decir sobre Paco de Lucía, el año pasado, que prácticamente estaba acabado. Lo que tendría que haber hecho es darle las gracias por la gigantesca labor que ha hecho en el mundo por nuestro género. Nunca le pagaremos suficientemente por lo que nos ha dado.
¡Aah! por cierto, me ha dicho Paco (de Lucía) : Enrique, dile a Martín que le den con el calcetín…( imagino que será sudado…).
No le contestaré a ninguna otra difamación de las que usted acostumbra señor M.M.M.M; por cierto, ¿no le parecen a usted demasiadas ¨emes¨?…
Escrito por: Enrique Morente.
Firmado por:
Paco de Lucía
Arcángel
Javier Barón
Esperanza Fernández
Miguel Poveda
Estrella Morente
José Enrique Morente
El Pele
Julián Estrada
J.M. Gamboa
J. Luis Ortiz Nuevo
A. Benamargo
Agapito Pageo
Pitingo
Juan Vergillos
Toni García
Mayte Martín
Juan Verdú
Jacinto González
María Toledo
Belén Maya
Israel Galván
Fernando Terremoto