Entrevista con Marina Heredia.

Su coreado debut con “Me duele, me duele” abrió un hueco a la artista comercial. Pero además de eso había cantaora, y de las buenas. No le echaron cuentas a sus condiciones reales pero los directos ya eran abrumadores. Han tenido que pasar casi diez años de aquello y ella autoconvencerse de que sabe cantar por soleá, y además grabarla. De que puede con eso y con lo otro, que en este tercer disco es máxima ortodoxia. Su autoexigencia le ha llevado a la reflexión y a pulir detalles años y años. Pero la espera ha merecido la pena, porque cuando los recitales de Marina Heredia ya son convincentes hasta para ella misma, el regalo que nos trae con “Marina” tiene pinta de poner a todos de acuerdo.     

Has insistido mucho por ahí que este es el disco más “tuyo”
“Puede ser. Es un disco en el que está todo eso que yo quería que apareciese, tal y como yo quería y cuando yo he querido. Así que sí…más a gusto no me puedo haber quedado. No me va a costar defenderlo en directo y por eso también estoy satisfecha. Porque aquí está mi base. A lo mejor los tangos de Graná son de otra manera en el escenario y aquí se ha escogido algo en concreto más corto, pero la base de mi cante es lo que ha servido de filosofía para hacer “Marina” y es lo que se ha grabado”

¿Qué pasaba antes?
“Nada, es que eran otras circunstancias. No necesariamente es que estuviera condicionada por alguien…es que yo no estaba preparada para cantar estos estilos y grabarlos. Me daba mucho reparo hacerlo. En el disco anterior ya empecé a hacer lo que yo quería y se empezaron a ver rasgos de mi libertad, de las ganas de tirar por mi camino. Y esto es un pasito más.”

Ya estaba por ahí Bolita
“Sí, lo sé, y él conoce mi voz casi mejor que yo, y sabía que no lo hacía mal.  Pero lo de cantar y grabar los cantes serios era un reto personal, íntimo. Él, que es importantísimo para mí y llevamos juntos artísticamente quince años, se ha encargado de otras cosas.”

¿De qué?
“Muchísimos pequeños y grandes detalles, por ejemplo el orden de los temas, la elección de guitarristas, llamar a Diego del Morao, a Miguel Ochando por malagueña…. Él ha puesto mis deseos en práctica. Es mi otro yo artístico”

A Parrita me figuro que lo llevas escuchando en el coche toda la vida
“¡¡Yo soy fanática de Parrita!! Lo escucho desde hace más de veinte años, a muerte. En el coche y en todos los sitios. No se le ha hecho justicia a Vicente. Me sé todos sus temas, la primera que está en la tienda para comprar sus discos soy yo”.

¿Hablaste con él?
“Ya habíamos intentado antes hacer cosas juntos pero no pudo ser. Así que ahora, de todos los temas que me gustaban, que eran un montón, escogí este y para adelante. “No me lo creo” es especial para mí. Mucho”.

Tema a tema has rebuscado bastante, en cuanto a estilos, letras, y siempre en la ortodoxia
“Ahora no se lleva mucho la ortodoxia, pero me tocaba, lo mismo soy un poco rara pero mientras haya para pagar la hipoteca y mi gente pueda comer, lo mío tirará por ahí…
Los tangos del Albaycín son complejos. Yo escogí unas letras en concreto, pero en mi tono normal que es al cinco por medio en tangos, era muy complicado hacerlos. Así que hemos buscado algunos estilos de Granada que se puedan hacer en mi tono y hemos dado con esto.
Los fandangos del Albaycín, también tienen su historia. Originalmente eran de las fiestas en las cuevas del Sacromonte, Frasquito los actualizó y los hizo cantes serios ralentizándolos. Nosotros los hemos dejado en un término medio de velocidad.”

La soleá parece lo más importante, en lo artístico y lo sentimental
“Es muy difícil cantar por soleá. Y yo he cantado muchas, pero sobre todo he escuchado a mi padre, que es un gran cantaor de este palo. Y lo tenía en casa, y sabía lo duro que es. Además tengo la costumbre de grabarme todo lo que hago en directo y volver a escucharme, gracias entre otras cosas a que mi técnico de sonido es familiar mío y tengo esa ventaja. Total que hasta que yo no me he visto en los directos capaz de hacer una soleá en condiciones, no me la he grabado. Soy una persona con muchas dudas y en esto las tenía, vaya que las tenía. Cuando he cogido las riendas de mi soleá y de mis cantes es cuando me he decidido, pero hasta que no me he visto cantando como quería no tenía fuerzas para ponerlo en un disco.
Además esta soleá tiene un recuerdo a ese cante que hacía tan bien Camarón, que es otro de mis artistas de cabecera… vamos, que este es el cante “eje” del disco”

¿Pero tu padre y Camarón se parecen cantando?
“Qué va, Camarón tenía esa voz, ese quejío fino…y mi padre era más del tipo del Indio Gitano, ronco, de esos que en cuanto abren la boca ya suena flamenquísimo”

Pues la hija ha salido angelical pero con poderío
“Pues mira, yo creo que con el tiempo voy cogiendo más cosas y matices de mi padre. Mi hijo dice que el abuelo canta así aagggggggg y que su madre asi iiiiiiiiiiiiii, pero yo creo que cada vez saco más cosas de mi padre.
Lo del poderío puede ser porque miro y admiro mucho a la Paquera, el otro día me lo decía el guitarrista en el escenario el día de la presentación…cuando me puse así con la mano…como hacía la Paquera cuando lo daba todo…al final de los cantes…¡¡¡eres clavaíta a la Paquera!!!”

La Paquera también suele aparecer en tus preferencias
“Algunos dicen que si no era una cantaora larga, que no tenía un repertorio amplio, que si tal que si cual…a mí me parece la cantaora más flamenca de la Historia. Y la siguiriya del disco es un homenaje a ella. Era muy fuerte. Ella, mi padre, Camarón…”.

Le pediste a Juan (Farruquito) unas alegrías
“Le llamé, porque quería alegrías y sabía que él hace unas cosas preciosas. Necesitaba un cante fresco y tradicional a la vez. Él hace casi todo lo que hay en sus espectáculos y como somos amigos y hay confianza pues se lo pedí…a los quince días me envió un CD  con alegrías y cogí más o menos la mitad de lo que me mandó…lo otro me lo guardo”

Malagueña con Miguel Ochando, bulerías, cantes de levante a más no poder…
“Miguel es el mejor tocando por malagueña. Luego las bulerías “Entre chinos” están dedicadas e inspiradas en El Chino. Él era un cantaor de Málaga que venía mucho por casa. Era muy amigo de mi padre, es otro de mis referentes, y organizaban unas fiestas increíbles. Me acuerdo de verle en casa toda la santa noche cantando y no repetir ni una sola letra. Ni una. Y te estoy hablando de noches en las que yo me acostaba a las ocho de la mañana obligada por mi padre…yo, desde luego, no sabía que algún día iba a cantar cosas suyas, pero sí sabía que aquello me volvía loca. Además, qué cosas, a mí en casa me llaman “La China”, por mi cara…así que “Entre Chinos”.
Luego “Encarnación”, que son cantes mineros. Es en homenaje a Encarnación Fernández, que fue la cantaora gitana que engrandeció todos esos estilos”.

Mujeres como Encarnación y la Paquera lo tuvieron difícil…
“Sí, bastante más que nosotras ahora, pero hemos llegado, estamos para quedarnos y el cante femenino va a más…”

¿Ves a los de tu generación llegando a viejos cantando flamenco?
“Sí. Somos flamencos ahora y lo seremos siempre Aunque nos pongamos a grabar Rock & Roll o nos distraigamos, al final de un concierto acabaremos cantando flamenco. Es lo que somos y de donde venimos.”

Pero aguantáis poco en esto, quizá la excepción sean discos así
“Lo que pasa es que yo puede que fuese de las primeras de mi generación en salirme, en derivarme. Y ahora estoy volviendo. Es lo que toca. Realmente otros empezaron la casa por abajo y ahora se están saliendo mientras que yo hice lo contrario, empecé por lo alto y ahora estoy poniendo los tabiques…estoy haciendo la ortodoxia que antes quizá no hice.
Son caminos diferentes, pero frecuentes, de ida y vuelta en esto…”

Entonces ¿qué puede fallar en el flamenco para tanto vaivén?
“Es muy difícil vivir del flamenco, del FLAMENCO. Y a la vez es muy fácil tener contacto con otras músicas, nos gusta experimentar y la gente de desespera, quiere inmediatez y esto es una carrera de fondo…todo eso junto. Pero es que, por ejemplo en mi tierra, es dificilísimo programar flamenco, que se potencie esto…quedan “Los Veranos del Corral”, que organiza Raúl Comba y que como se descuide se los quitan. Los artistas flamencos tenemos que ir a taquilla a los teatros para que se nos programe allí. Y la juventud va a ver flamenco pero las instituciones pasan olímpicamente de nosotros”.

¿Tienes espinas clavadas?
“¿Que si tengo? Yo soy un cactus, si yo te contase todas las cosas que quiero hacer… tengo muchas ganas de mogollón de proyectos y no descarto nada de nada. De momento girar este disco, que ha costado mucho trabajo y tiempo. Y disfrutarlo. Luego quizá haré algo más temporal, en plan temas para una época del año concreta… y más cantes tradicionales, que con esto no he acabado mis ideas de ortodoxia”.

¿El niño qué hace? ¿Canta, toca o baila?
“Uffff, de momento se sabe muchos temas míos, pero a él lo que le gustan son los toros, aunque no se pone delante. No sé, tiene las dos cosas en casa para escoger. Es muy chico, con seis años, ya veremos”.

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