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Pasamos a conocer el tablao madrileño Las Tablas, un nuevo concepto de tablao flamenco que abrió sus puertas en el año 2003, rompiendo con la estética habitual -hasta el momento- de lo que se entendía por tablao flamenco.
A principios de este siglo, cuando sólo quedaban algunos de los tablaos clásicos en la capital, dos bailaoras, Marisol Navarro y Antonia Moya, decidieron emprender esta aventura, abrir un tablao flamenco “Las Tablas” con el apellido “Nuevo espacio escénico flamenco” que resume perfectamente lo que buscaban.
Su decoración es moderna, no hay sillas de enea ni mesas rocieras, las exposiciones de fotografía o pintura de temática flamenca son frecuentes. La disposición del local es en forma de L, con una buena visibilidad desde todos los ángulos. La acústica del local es buena y el sonido es amplificado, aunque imagino que dependerá de cada espectáculo los decibelios no son un problema. Los micrófonos también son minimalistas, o portátiles, apenas se ven, no molestan en ningún momento a la visibilidad del espectáculo.
La localización del tablao es muy céntrica, en Plaza de España, pero si es cierto que está en la esquina más recóndita de la misma y no resulta fácil llegar. Lo más fácil es entrar desde el Palacio Real, en Opera, dejando los Jardines de Sabatini a la izquierda. Actualmente también existe un acceso directo desde Plaza de España.
Propuesta artística
El hecho de que las propietarias sean bailaoras, hace indicar que ellas forman parte del elenco artístico del tablao, así ha sido hasta ahora.
Últimamente es más difícil verlas en el espectáculo, la carga de trabajo y responsabilidad que conlleva la gestión de un negocio hace más difícil su continuidad. Antonia nos confiesa “cuando salimos a bailar procuramos estar concentradas en ello, pero a veces se te va la vista al ver que algo no te gusta”. Han estado bailando a diario durante 10 años, en formato cuadro y acompañadas por un artista invitado, generalmente hombre.
Actualmente, aunque siempre se reservan unos días dentro de la programación mensual, lo habitual es la contratación de artistas invitados que ofrecen el espectáculo completo, cantaor, guitarrista, bailaor y bailaora.
En nuestro caso disfrutamos del bailaor gaditano Jesús Fernández -premio Desplante en el Cante de las Minas- y la granaína Anabel Moreno, bien acompañados por la guitarra de Niño Manuela y el personalísimo cante de Rafael Jiménez El Falo. Sólo 4 artistas en el escenario, ofreciendo un espectáculo completo con bailes individuales por parte de Jesús y Anabel y otros bailes en el que participan ambos bailaores con coreografías bien estudiadas y perfectamente sincronizadas entre los 4 artistas. Como nos indica Antonia “lo importante no es el número de artistas en el escenario, sino la calidad, procurando que el espectáculo tenga un hilo conductor, unas transiciones adecuadas, que abarque un numero variado de palos, el arte no puede ser rutinario, tiene que estar motivado, quizás no se consigue todos los días, pero al menos hay que intentarlo”.
Otros artistas invitados habituales en Las Tablas son Rafael Peral, José Jurado, José Barrios, Francisco Hidalgo, Mariana Collado,… todos ellos dentro del circuito profesional flamenco que se pueden ver en los mejores tablaos y por supuesto en importantes festivales flamencos.
Familiaridad
Otra de las ventajas de que las propietarias sean artistas es el trato entre los artistas es de compañeros, existe un trato familiar entre todos y que se extiende también entre todo el personal del tablao. Los camareros no son profesionales, que no quiere decir que no sepan hacer su trabajo, “muchos de ellos son actores”, nos cuenta Antonia, “procuramos que estén implicados de alguna forma con el arte y el espectáculo”.
Gastronomía
En Las Tablas no existe cocina como tal, pero si se puede cenar, se ofrece una carta sencilla y de calidad, productos ibéricos, vinos, tostas, ensaladas, quesos, patés, … ya en su web avisan que su apuesta principal es por el flamenco. Aun así, cuando así lo requieren los clientes en su reserva, se ofrecen menús elaborados que son ofrecidos por un catering externo.
Público
En sus trece años de vida, Las Tablas ha creado un público, aunque lo normal es que sean extranjeros, como en la mayoría de los tablaos, son muchos los que repiten cuando vuelven a Madrid. Antonia Moya nos cuenta que tienen especial relación con unas cuantas embajadas en Madrid que periódicamente les envían a gente cuando tienen compromisos con visitas de sus países o recomendaciones que realizan a sus compatriotas. También son muchos los españoles que ‘llevan a ver flamenco’ a sus visitas foráneas.
Circulo Flamenco
Desde hace un par de años, también en Las Tablas, se produce uno de los milagros del Flamenco en Madrid, el Círculo Flamenco de Madrid celebra cada 15 días sus actuaciones y eventos. Un grupo selecto de ‘muy’ aficionados asiste cada jueves a presentaciones de discos, conferencias, encuentros con artistas singulares, … por Las Tablas, gracias a su colaboración con el Círculo han pasado lo mejor del Flamenco actualmente. Manuel Moneo, Dani de Morón, La Macanita, David Lagos, forman parte de la temporada actual. Esto también hace posible que sean muchos los aficionados y artistas que tengan como referencia este rincón flamenco de la capital.
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