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Texto: Estela Zatania
 Nacida
en 1932 en la calle Nueva del barrio de Santiago, María empezaba
a cantar y bailar en tablao y teatro siendo joven. Fue el mismo Antonio
Mairena que reconoció su gran capacidad y la destacó.
Se retiró de la vida profesional todavía en plena juventud,
volviendo a actuar en público tras la muerte de su célebre
hermano para conservar y trasmitir los cantes de su familia. Con un decir
y eco que recordaban al Terremoto, María Soleá cantaba por
fiesta con la misma soltura con la que entregaba los cantes más
básicos, y su gracioso baile remataba cada actuación, incluso
en el 2003 cuando intervino, ya prácticamente invidente, en la
actuación titulada “Los Venerables” dentro de las Fiestas
de Otoño de Jerez. Su voz figura en varias grabaciones.
Fotos excepto portada: Estela Zatania
Foto portada: Inma Puchal
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