Resumen: Dorantes: ConVivencias, con Lebrijano, Esperanza Fernández, Orquesta filarmonica de Andalucía…
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ETNOSUR '09
CONVIVENCIAS DORANTES y artistas invitados 19 de julio 2009 Alcalá la Real (Jaén) |
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Piano: Dorantes; contrabajo: Reanud García-Fons, kaval: Theodosii Spassov, cante: El Lebrijano, Esperanza Fernández; baile: Pastora Galván; guitarra: Pedro Peña, percusión: Tete Peña y Cepillo; bajo: Popo; coros y palmas: Los Mellis y Juán Sanjuán; Orquesta Filarmónica de Andalucía dirigida por Tomás Gubitsch; cuarteto de cuerdas: Ensemble 3 Texto: Rubén Gutierrez Especial ETNOSUR TRECE, ETNOSUR FLAMENCO. Reseña, fotos, videos Mientras la mayoría de los medios informativos se dedicaban a preparar el cuarenta aniversario de la llegada del hombre a la luna, nosotros llegábamos a la Sierra Sur de Jaén para someternos a la invasión de los lunares. Un festival marcado por el marchamo de los ritmos étnicos este año ha hecho un guiño especial al flamenco. Entre las múltiples actividades de su programación los asistentes han podido participar en los talleres de palmas de Jerónimo Utrilla, el baile flamenco de Katherina La Greca, el de cajón impartido por Javier Ruibal junior o la exposición de fotografías de Mario Pacheco. El viernes 17 ya se lió gorda con la intervención de Enrique Morente junto al poeta Luis García Montero. Los granaínos armaron el taco en la plaza del ayuntamiento de Alcalá, y aunque no lo presenciamos, lo pudimos escuchar gracias al programa Duendedeando que magistralmente dirige Teo Sánchez en Radio 3, que lo realizó en directo ese fin de semana como otra propuesta más de Etnosur.
En los albores de este encuentro se programó una velada muy especial con más de ochenta músicos que se subirían en las postrimerías del espectáculo “Convivencias” dirigido por David Peña “Dorantes” y su hermano Pedro. Previamente también pudimos deleitarnos con las fusiones de “Candelaria”, el grupo off de El Bicho, y del salero de la compañía circense flamenco Albadulake, que sedujo a mayores y pequeños con su propuesta “Majareta”. Entrando en materia decir que el gran escenario montando al efecto recibió primeramente a un Dorantes en solitario que arrancó el espectáculo exhibiendo su técnica pianística. Juegos armónicos y melódicos se sucedieron desde los tintes impresionistas hasta los jazzísticos, sin olvidar el flamenco en forma de tanguillo cuando apareció en escena el contrabajista Renaud García Fons y los percusionistas. Destacar igualmente el virtuosismo del francés que lleva bastante tiempo abducido por el flamenco de la mano de los guitarristas Pedro Soler o Gerardo Núñez, y que ya tomara parate en aquel excepcional proyecto que llevó por nombre Jazzespaña. Precisamente en su último trabajo discográfico “La línea del Sur (2009) ha contado como artista invitada con Esperanza Fernández. La trianera apareció en la escena con su mantón azulado para interpretar el “Gelem, Gelem”, traducido en un extremecedor lamento junto al kaval búlgaro. Tras el himno de los gitanos haría una versión del “Moonlight in Vermont”, popular tema americano de la escena jazzística que cantaran Ella Fitzgerald, Nat King Cole o el mismísimo Sinatra.
Uno de los momentos más esperados era la intervención de Pastora Galván, pues su baile cada vez nos embruja más, y está llamada a ser una de las grandes de la historia del baile jondo. Tradición y modernidad que aúna tanto la escuela paterna como la de su hermano, no exenta de personalidad. Es especial nos agradó su vestuario, acorde con la del público asistente con pantalones tipo mongol , y sus ganas de arriesgarse al bailar con el acompañamiento de un cuarteto de cuerda. Se llevó una de las primeras grandes ovaciones de la noche. Solo falta la presencia del último de los invitados de esta noche. Cunado Juan Peña piso el proscenio, el mayoritario público joven le rindió el tributo que merece una leyenda viva de este arte. El Lebrijano interpretó primeramente unos tangos para después ofrecer su “Coronel no tiene que le escriba” que seguro García Márquez hubiese aplaudido con creces al ver bailar sus versos por seguiriyas a Pastora con un vestido blanco que llenaba todo el marco cual luna llena. Quedaba nada más que la Orquesta Sinfónica de Andalucía completara lo que estaba siendo una noche de sueño de verano. Bajo la batuta del argentino Tomás Gubitsch, se integraron en la propuesta que había ideado Pedro Melguizo, director de Etnosur para acompañar las composiciones de Dorantes “Sur”, “Orobroy”, “Semblanza de un río” “Batir de Alas” y “Caravana de los Zíncalis” esta última con todos los artistas en el escenario haciendo las delicias del respetable exaltados cual lunáticos. El buen hacer del técnico de sonido Manu Miñacas y los bellos arreglos orquestales provocaron un estallido de júbilo entre los asistentes que no dudaron en solicitar los bises oportunos que se tradujeron en una nueva interpretación del tema que tanta fama ha dado al pianista lebrijano, y es que la belleza de Orobroy así lo requiere.
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