Chano Domínguez – Oye cómo viene

Chano Domínguez -  Oye cómo viene

Chano Domínguez - Oye cómo viene

1. Tangos de Garraf
2. ¿Qué voces son esas?
3. A mi Padre
4. Vamonos pa’Cai
5. Por Alegrías
6. Monk Medley
7. Soleá Blas
8. Rumba pa’Jerry
9. Oye como viene
10. Mañana de Reyes
11. El sosiego

El disco viene sabroso y resume la trayectoria de Chano cuando se cumplen diez años del primer trabajo en solitario. Una muestra de cómo ha evolucionado su lenguaje hacia terrenos mestizos y cosmopolitas. El proceso que ha dado vida a su música se remonta a los años del rock andaluz desde los teclados de los grupos Caí o Hiscádiz. Viene de la convivencia flamenca con el jazz, el rock y el pop, de la constante fusión de músicos que, como pianista, le ha tocado vivir. De la referencia de la música flamenca desde el cante y el toque, de su contacto con el maestro José Romero, de los grandes del jazz, de Bill Evans a Thelonius Monk. De sus hallazgos junto a Jorge Pardo, Javier Colina, Martirio, Caries Benavent, El Bola o Tino DI Geraldo, del contacto esencial con el latin-jazz, con Jerry, Giovanni Hidalgo, Bebo Valdés o Paquito D’ Rivera. En sus palabras: “El flamenco nunca ha sido una música que haya estudiado analíticamente, la música que yo he aprendido ha sido el jazz y la música moderna. Mis composiciones son estructuras de jazz adaptadas a un ritmo de flamenco para la improvisación, y están diseñadas para su desarrollo en vivo”.

Algunos temas han sido retomados de su obra grabada, aunque todos renovados en estas tomas vivas. Se escuchan los tonos de Chano (1993), de Hecho a mano (1996), del doble En directo desde el Café Central madrileño (1997), y de Imán (2000), música que ahora evoluciona hacia terrenos más flamencos, más personales, más necesarios. Chano Domínguez y su banda crean con este disco un nuevo referente para la evolución de una música de vocación universal como es el flamenco, desde el regio piano del jazz, más o menos latino, creando un sonido excepcional. La comarca del Garraf, entre Vilanova y Castelldefeis, inspira a Chano este disco, el lugar que le produce el sosiego necesario para componer números como los Tangos del Garraf. Un poderoso tumbao que entrelaza temas flamencos con otros más tropicales en las variaciones, sobre una batería y bajo de categoría. La misma que en el baile, o en los virtuosos sincopados del cante.

¿Qué voces son esas? abre con el cante por seguiriyas de Blas, entre pellizcos de Chano en el arpa del piano y el toque ambiental en el teclado. Se escucha entonces el aire de los fandangos de Huelva que sirve de base flamenca. El intermedio del piano por jazz, en el aire ternario de los fandangos, prepara la cabal de remate.

A mi padre es una balada de tintes jazzeros en el compás de la soleá por bulerías. Muestra el lado cantable del piano de Chano, con un solo sentido de Pablo al contrabajo. El número se despliega con los jaleos de Jerez, para regresar de nuevo a la calma primera.

¡Vamonos pa’Cai! con latin-jazz puro flamenco. Por bulerías, con la caja y bajo doblando una melodía de contratiempos, con las patadas ultraflamencas de Tomasito y Grilo, el tumbao a tres tiempos del piano, y el diálogo de pies. Con el sabroso compás de espera para el toque de Chano por latin-jazz, y que no falte cante gaditano para el baile.

En Por alegrías une Chano dos de sus composiciones, Alegría callada de Imán y El esterero de Chano, con guiños a Pastorius, y a Camarón en la salida del cante. El blues en la batería mientras el aire flamenco lo imponen bajo, botija y palmas, el modo pastueño de las alegrías antiguas. A modo de puente y final la inteligente armonización del clásico tirititrán. Y muy buen baile.

En Monk Medley Chano vuelve sobre dos números de discos anteriores, los inspirados en los clásicos de Thelonius Monk, primero Bremsha Swing (Hecho a mano), saltando con Grilo del rag a las bulerías, para regresar al rag, sin previo aviso, metido en síncopa, trazando claves que de buenas son flamencas. El intercambio, alternancia y hasta superposición de los dos aires domina esta primera parte. Well You Needn’t (Chano), también por bulerías, desemboca en una llamada del piano al baile recreando los tonos por fiesta sobre el teclado. Patadas por bulerías de Grilo en los silencios de piano y bajo, la antigua herramienta del jazz usada aquí a lo flamenco.

Varias vueltas las que ha dado Chano al blues por soleá, “una ¡dea de lo que para mí es tomar el sentimiento del blues dentro del flamenco”. Un buen ejemplo Soleá Blues (Hecho a mano), ahora Soleá Blas, un resumen del proceso: montar la estructura formal de blues, doce compases, sobre una personal rueda de acordes por soleá, durante seis compases (dobles), cante de rigor y final por bulerías.

Rumba pa’Jerry González. No hay que hablar mucho para tocar con Jerry, reconoce Chano durante la preparación de esta rumba flamenca con toques de la rumba cubana al repiqueteo del quinto. Chano muestra su personal estilo de entender el latin-jazz, desde Cádiz, y en el solo, Jerry canta con su piano de tumbadoras al aire flamenco de la rumba. Tremendo el cajón de Piraña, y el tumbao de piano y bajo con el que dibujan el montuno.

Oye cómo viene. Escucha como Chano armonizó el cante flamenco para su presentación en “Calle 54”, adobándolo con las tonalidades del jazz, mostrando la extensión del cante de Blas. Muchos de los principios de lo que es hoy el jazz-flamenco más auténtico, por bulerías, están aquí. Con la percusión flirteando con batería y bajo entre la rítmica del blues ternario y las bulerías.

De un juego que surgió un 6 de enero, nace el Regalo de Reyes que el Garraf hizo a Chano esa mañana, el swing vaciado en el compás de los tanguillos, para explotar en las variaciones la poli-rítmica del tango gaditano en todas sus variantes. Exposición, desarrollo (solo de tumbadoras de Piraña) y reexposición, todo por jazz-flamenco.

Cierra el disco El Sosiego que inspira el Garraf, en modo blues y al aire de bulerías por soleá. Los nudillos de Tomasito y Grilo sobre un baúl de carga, arropan el ostinato del piano, muy flamenco en la rítmica y puro jazz en los acordes, rematando cada vuelta con desenfadada flamencura.

¡Ole Chano!, ¡ole todos ustedes!

Fausto Núñez

Créditos:
Pablo Martin (contrabajo), Guillermo Mc Gill (bateria, cajón, palmas), Blas Córdoba (cante, palmas), Israel Suárez ‘Piraña’ (percusión), Tomasito (palmas, al baile temas 1, 4 y 9) Joaquín Grilo (palmas, al baile temas 5,6 y 7), Jerry González (congas en Rumba pa’Jerry)

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