FESTIVAL DE NIMES 2008. Ganadores Concurso de Córdoba. Marco Flores, David Palomar, Rafael Rodríguez

FESTIVAL DE NIMES 2008
Ganadores del Concurso de Córdoba

FESTIVAL DE NIMES 2008
Ganadores del Concurso de Córdoba
Miércoles, 23 de enero, 2008. 2000h. Odeón. Nimes (Francia)

 


Texto: Estela Zatania.

fotos: © Jean-Louis Duzert

JOVEN SABIDURÍA

1ª parte: Cante: David Palomar. Guitarra: Rafael Rodríguez.
2ª parte: Baile: Marco Flores. Cante: Leo Treviño, Emilio Florido. Guitarra: Antonia Jiménez. Palmas: Vanesa Coloma, Cecilia Lizcano.

En el año 2007, el jurado del Concurso de Córdoba celebrado cada tres años desde su inicio en el 1956, coronó a dos jóvenes valores del cante y baile respectivamente.  A menudo en estos eventos nos parece que no ganan los que deben, o ganan los que no deben, pero en aquella edición del prestigioso certamen, no había desacuerdo entre la afición: David Palomar, gaditano, Premio Camarón y Premio Manolo Caracol, y Marco Flores, de Arcos de la Frontera, Premio Absoluto de Baile, con apenas 30 años cada uno, ya son maestros en sus respectivas especialidades.

A pesar de haberse criado en el castizo barrio de La Viña, David llega tarde al oficio, habiendo pasado primero por grupos de fusión y rock.  Pero su forma de cantar y sus conocimientos delatan no sólo vivencias auténticas, sino una desbordante afición.  De hecho, lo más destacable de todo lo que hace es su capacidad para infundir vida y frescura en las formas y letras de toda la vida.  Otros buscan la novedad por caminos experimentales – David Palomar se permite el lujo de confiar en el cante más tradicional para crear su propio mundo nuevo, y el resultado nos recuerda que sólo se ha empezado a descubrir la amplitud del arte jondo.

 

Honestidad, oficio, afición… frescor sin salirse de las formas

Solo, con luz cenital y sin amplificación, comienza a palo seco regalándonos el pregón de Macandé, una curiosidad que rescata el cantaor.  David comenta que esta es su primera actuación en solitario fuera de España, y grita uno “¡no estás solo, estamos contigo!”  En Nimes siempre encontramos a un público conocedor y agradecido.  A continuación interpreta unas siguiriyas, posiblemente lo mejor del recital, donde da vida y urgencia a este cante difícil y cerrado.  Hay honestidad, hay oficio, hay afición.  Hay frescor sin ánimo alguno de salirse de las formas.  Alegrías y cantiña con todo el sabor que corresponde, con esa serenidad natural de los gaditanos, y siempre estilizando, personalizando.  Por soleá, recuerda al Juaniquí, al Chozas y a Paquirri.  Ofrece un breve esbozo biográfico del Mellizo antes de meterse en la malagueña de éste.  También en Córdoba David supo entablar una relación amena con el numeroso respetable, y esto aporta mucho, tratándose de un arte desarrollado en entornos íntimos.  Cante minero, y para terminar, bulerías de pie a compás relajaíto y sabor a raudales con cantes de La Perla y Juan Villar, entre otros; simpática pataíta y un bis de fandangos de su propia creación.  Y a todo esto, el portento de Rafael Rodríguez acompañando a la guitarra con sonidos antiguos y actuales mezclados con sabiduría y personalidad.

 

Sereno y sobrio hasta por bulerías

En la segunda parte Marco Flores no defraudó.  Con la elegancia varonil de un Güito o un Manolete, abre con farruca, y la excelente guitarra de Antonia Martínez reivindica un lugar para las tocaoras que están prácticamente ausentes en el panorama profesional.  Los cantaores Leo Treviño y Emilio Florido ofrecen tangos con el quejío canastero que Camarón nos descubrió, y vuelve Marco para martinete con un catálogo de posturas perfectas y gestos sutiles.  Después de una malagueña cantada por Florido, Marco viene a rematar la velada con sus emblemáticas alegrías.  Es sereno y sobrio hasta por bulerías, manteniendo su fascinante compostura hasta el final.  Un simpático fin de fiesta pone el colofón a esta noche muy flamenca en el Festival de Nimes, 2008.

 

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