Pedro Plaza Martín 'PEDRO ESCALONA'

1946-2010

Estela Zatania

Justamente cuando la afición flamenca está consternada por la inesperada desaparición del maestro Enrique Morente, un guitarrista, trabajador flamenco de toda la vida, ha dejado de existir en su Málaga natal.


Camarón con Pedro Escalona. Foto archivo Paco Roji

Pedro Plaza Martín, de nombre artístico Pedro Escalona, uno de los más destacables guitarristas que ha salido de Málaga, tenía 64 años.  Durante varios años otro guitarrista, Carlos Lomas, compartió escenario con Escalona y con dos guitarristas más, Enrique Naranjo y “Carapelota”, en la mítica Taberna Gitana en el centro de Málaga capital.  Lomas recuerda a su amigo y compañero como un hombre humilde, intenso y sensible, siempre dispuesto a defender creencias y derechos, tanto suyos como de los demás.  Hace cuatro años Escalona no dudó en denunciar a la Diputación de Málaga por haber empleado grabaciones suyas en una antología conmemorativa de cantaores malagueños. 

En la década de los setenta, Pedro Escalona fue uno de los primeros y más incondicionales admiradores del toque de Paco de Lucía, y cuenta Lomas que Pedro fue en aquel entonces el que más a fondo conocía el repertorio y obra del algecireño.  Fumador empedernido, serio y formal, ansioso de cumplir al máximo como guitarrista principal del cuadro de la Taberna, también supo aconsejar cariñosamente a los guitarristas jóvenes, como un hermano mayor, con comentarios y recomendaciones siempre acertados.


Pedro Escalona con Chano Lobato

Por el año 1972, cuando un jovencísimo Tomatito llegó a Málaga con su familia desde Almería después de una temporada en las Islas Canarias, encontró trabajo en la Taberna.  Escalona, que siempre le llamaba “niño”, le orientó sobre la marcha y tuvo una gran influencia en el que hoy en día es uno de los más grandes de la guitarra flamenca.

En aquellos años la Taberna Gitana fue parada obligatoria para todas las figuras del género flamenco.  Escalona disfrutaba con su oficio de acompañante de cante y baile, faceta en la que era altamente competente.  No aspiraba a concertista, ni tenía el menor interés en el artisteo.  Mario Maya, Pansequito, Farruco, Amina, Enrique Montoya o Bambino son sólo unos cuantos de los que quisieron tentar a Escalona para que dejara su puesto en el tablao y fuera de turné, cosa que el malagueño nunca quiso aceptar.

Pedro Escalona, que también fue autor de coplas flamencas, deja unas cuantas grabaciones.  Además de la polémica Antología de Cantaores Malagueños, es destacable su intervención en “Potaje Gitano en Directo 1971”, y una admirable grabación con el cantaor Gaspar de Utrera.

 

 

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