Entrevista a Victor Monge 'Serranito'



Nos reunimos con Serranito, en su casa, en su cuarto
de estudio, rodeado de cuadros de Sábicas, Ramón
Montoya,… y de más de media docena de guitarras,
a pesar de ser de llevar mas de 40 años al frente
de una generación de guitarristas no hay que
descuidarse, la juventud viene muy fuerte. Tiene 17
discos publicados, ha recorrido el mundo varias veces
llevando el flamenco y otras propuestas musicales de
lo más diversas. Lo último que ha realizado
a sido el Concierto de Aranjuez, del cual está
dando cuenta por países como México, Centroamerica,
Turquia, Egipto, los países del este, etc.. y
en poco tiempo volverá al mercado discográfico
con varios discos.

En esta extensa entrevista nos cuenta sus inicios,
habla de la generación de guitarristas que constituyeron
Manolo Sanlúcar, Paco de Lucía y él,
afirma que se está perdiendo mucho el flamenco,
por querer acercárlo a tendencias más
comerciales, aunque asegura que la guitarra tiene la
continuidad asegurada con los guitarristas jóvenes
de ahora.

¿Cómo fueron
tus inicios con la guitarra?
Empiezo a tocar la guitarra cuando tenía
12 años, como profesional, por las circunstancias de
la época, las necesidades de entonces, yo nacía
en el 42, te puedes imaginar, en el 53, 54 una época
muy difícil, era en la post-guerra, empecé a
trabajar en Riscal, un sitio que estaba muy de moda para los
artistas de cine de entonces, … estuve con mi hermano y
otro compañero más, los tres, nos llamábamos
«Los Serranos» y de ahí viene «Serranito»
por que era el menor de los tres.

Pero, ¿tu familia es de
guitarristas?

No, no, mi hermano mayor cantaba, pero tampoco era flamenco,
aquel grupo no era de flamenco especialmente.

¿Como aprendiste a tocar
la guitarra?

Mi padre tenía una guitarra en casa, pero no sabía
tocarla, tocaba tres acordes, pero me inicie, me gustaba mucho,
parece ser que se llevaba en la sangre. Mi vecino tocaba un
poquito la guitarra, muy poco, y me ayudo algo, con 12 años
se notaba que se me daba muy bien.

Me ha gustado tocar
para cantar y bailar, es como el conservatorio para nosotros.

Ahí viste que tu camino
iba por ahí. ¿había algún sitio
para aprender?

Estaba el conservatorio, pero no se enseñaba flamenco,
y sigue así, por desgracia. De vez en cuando nos piden
que demos algún curso, pero de forma oficiosa, pero
bueno, así somos y así estamos. Aunque yo no
he nacido para ser profesor, pero estaría bien que
se enseñara flamenco en el conservatorio, para que
la gente joven aprenda y lo haga con más sentido común,
con más lógica, por que en la calle no se aprende
lo mismo, pero parece ser que el flamenco es así.

¿Cuándo lo conviertes
en tu profesión?

Después de aquello de Riscal, empiezo a tocar en La
Taberna Gitana, que es hoy «Torres Bermejas», con
14 años, posteriormente empecé a trabajar con
un ballet, debutamos en Pasapoga en Madrid, imagínate.
Desde entonces nunca lo he dejado.

¿Tú querías
tocar en solitario?

Siempre tenía la inquietud de tocar en solitario, lo
que más he gustado.
Me ha gustado tocar para cantar y bailar, es como el conservatorio
para nosotros. Se aprende tocando para los demás y
se aprende los cantes, los bailes.

¿Es necesario e imprescindible?
Totalmente imprescindible, es nuestra Universidad. Los artistas
de hoy que tienen calidad y posibilidades, muchas veces equivocan
la forma de trabajar y de formarse. Es necesario formarse
tocando para el cante y el baile, como conocimiento básico
que se necesita para luego poder hacer algo como solitas.
Para nosotros, el conservatorio está en la garganta
de los cantaores y en el baile.

¿Si ahora tocar en solitario
es difícil, antes lo era mucho más?

Te ponían muchas dificultades, la cultura musical que
había, hacía muy difícil que el público
aguantara. Aún hoy es muy difícil, por eso creo
que tenemos un gran mérito los que iniciamos esta carrera,
aunque antes de nosotros estaban, los puedes ver en esas fotografías,
Ramón Montoya, Sabicas, .. pioneros, mucho antes, pero
no se dedicaron de lleno, excepto Sabicas que se marcho a
América y estuvo bastante tiempo tocando sólo,
a su vuelta, recuperó el tocar para el cante, que también
le gustaba mucho.

De alguna manera,
se estableció una generación, Manolo Sanlúcar,
Paco de Lucía y yo, hemos luchao y dao a conocer
más la guitarra en el mundo.

¿Quién abristeis
el camino para la guitarra solista?

Nosotros, Paco de Lucía, Manuel Cano y yo, recuerdo tocamos
en la semana de estudios flamencos de Málaga, dedicada ese
año al maestro Sabicas, por lo tanto a la guitarra. Yo tenía
22 años y Paco tendría 17 o 18, Manuel era mayor que nosotros.
Mas tarde se incorporó Manolo Sanlucar y de alguna manera
se estableció una nueva generación, Manolo Sanlucar, Paco
de Lucía y yo. Juntos y despues por separado, cada uno con
su carrera, dimos a conocer la guitarra en el mundo. Tres
pilares de una generación, que no éramos los únicos, pero
fuimos abriendo el caminos, cada uno con su personalidad.
.

¿Pero la barrera de la popularidad,
la rompió Paco de Lucía?

Paco rompió esa barrera de la popularidad con «Entre
dos aguas» por que se lanzó muy bien, y se hizo
muy popular. Yo pegué mucho con «El pájaro
campana» y mi amigo Manolo con «El Caballo Negro»,
cada uno de nosotros con un tema diferente, posteriormente
cada uno se ha hecho su historia, una personalidad diferente,
formas de expresión y de tocar diferentes, formas de
enfrentarse al público diferente.

Paradójicamente, Paco me decía, cuando éramos
unos chavales, que no le gustaba tocar sólo, de hecho,
siempre ha ido acompañado.

¿La unión con Camarón
también hizo que Paco de Lucía tomará
mas relevancia?

Al revés, quién conozca la historia del flamenco,
debe de saber, que cuando nosotros lo conocimos, me acuerdo
muy bien, le escuchamos en Jerez, y Paco me dijo «este
niño me lo llevo a Madrid».
La unión entre los dos, hizo más populares a
ambos. Naturalmente, unieron fuerzas e hicieron una pareja
magnifica.

Paco, también hizo otras
cosas, con su Sexteto, su acercamiento al jazz.

Le hizo más popular para tocar en grandes sitios, en un estadio
de fútbol o en un palacio de deportes, Al Dimeola, John McLaughlin
y Paco, crearon una musica más asequible para llegar a mas
gente, que también sirvió, de ayuda para popularizar la guitarra
Yo también he compartido mi musica con Larry Coryel y Phillipe
Catherine, pero eso no significa que sea necesario, al final
te conocerán por lo tuyo. He recorrido el mundo tocando lo
que más me gusta. Ahora estoy tocando, el Concierto de Aranjuez,
soy músico y me gusta tocar de todo, sin embargo he tenido
que trabajar mucho para aprenderlo, por la falta de conocimientos
técnicos de la musica.

En
la guitarra siempre se está aprendiendo. ¿la
guitarra que tocabas hace 40 años, a lo que tocas ahora,
cual ha sido la evolución? ¿Cómo era
antes y como era ahora?

Eso tendría que explicártelo con la guitarra.
¿Ahora no tocarías como antes? No, no siento
eso, vas evolucionando y el cuerpo te va pidiendo otras cosas,
lo mismo que evoluciona la vida, evoluciona las tendencias
artísticas.

¿No se puede volver atrás,
no se puede tocar ahora como Sabicas o Ramón Montoya?

Claro que sí, si quiero puedo escuchar Ramón
Montoya, me lo estudio y lo toco, me sirvió para aprender,
pero ahora no tendría sentido. Como recuerdo estaría
muy bien, si eso hace que la juventud pueda escuchar la música
de aquel momento, que ha sido la base.

El flamenco es una evolución continua. No se puede
parar, evoluciona con la propia sociedad. Los flamencos más
puros, familias de Jerez, Sevilla, donde todavía se
conserva más añejo o de raíz, también
evoluciona, por que ellos mismos evolucionan, sin darse cuenta.
Lo malo es si se pierde la raíz, y hay mucha raíz
perdida, y ese es el verdadero problema que pudiera tener
el flamenco, por comercializarse, por las discográficas,
existe la tendencia a acercarse a ese tipo de música
más asequible para todos, que por eso no deja de ser
buena música, pero se va perdiendo la raíz.

Lo malo es si se pierde la raíz,
y hay mucha raíz perdida, y ese es el verdadero
problema que pudiera tener el flamenco, por comercializarse…

Ese es el peligro el de la evolución comercial, que
no es el nuestro, es otro tipo de evolución, no voy
a tocar la guitarra como hace 40 años, pero se va enriqueciendo
con todo lo que se va aprendiendo, no se puede hacer lo mismo
siempre, carece de mérito.

Últimamente, muchos guitarristas,
hablan de sus nuevos discos, como evolución del flamenco,
flamenco moderno, fusiones, etc… pero sin perder la raíz.

Si se ha fusionado, se ha perdido la raíz, eso está
claro.

No hay que mezclar las cosas, yo he tocado ahora el Concierto
de Aranjuez y no es flamenco, soy músico y he hecho
un trabajo que me ha encantado, y si además le das
un puntito nuestro, de nuestra forma de sentir, realizarte
a ti mismo. Si mañana, me ofrecen tocar otra cosa,
lo haré si mi interesa, pero cuando toque por Soleá
tocaré por Soleá, mi Soleá, mi evolucionada
Soleá. Esa es la diferencia en conservar la raíz
o no. Se le puede dar el puntillo flamenco a otras cosas,
pero no tiene nada que ver con la raíz.

¿Y por que lo dicen todos?
El flamenco vende mucho, gracias a nosotros y a muchos otros,
también en el baile, Carmen Amaya, Pilar López…
nos abrieron las puertas y gusta mucho en todo el mundo, a
los jazzistas les encantan. La prueba es que se viaja mucho
por todo el mundo.

¿hay guitarristas que siguen
tu escuela?

Todos los modernos, nos tienen a nosotros Paco de Lucía,
Manolo Sanlúcar o Serranito, unos tirarán para
uno y otros para otro, pero después los más
importantes, han hecho su propia personalidad, han hecho sus
formas y no se parecen a mí, ni a nadie.

En el flamenco, ¿no hace
falta grabar discos para poder trabajar?

Ahora, vengo de Guadalajara (México), con mas de 5.000
personas en el público, sin tener ahora mismo ningún
disco en México, lo he tenido en otras épocas,
pero estaba lleno de gente joven. El mero hecho de decir Flamenco
ya atrae, aparte de que afortunadamente mi nombre suena y
es conocido.

En Japón, se sabe que gusta mucho el flamenco, pero
nosotros fuimos los primeros en hacer público allí.
En Turquía existe una verdadera locura con el flamenco,
y nunca he tenido un disco allí.

¿Qué países destacas
tú que tengan especial afición a la guitarra?.
La guitarra gusta en casi todos los
sitios donde yo he estado tocando, pero por decirte, en casi
todos los países del este gusta mucho la guitarra,
Yugoslavia, Polonia, Hungria, Rusia,… yo he tocado mucho
por allí y todos los teatros se han llenado.

¿En España también?
Es mucho más complicado. Están los
festivales de flamenco, a los que asiste el público por su
prestigio. Pero por ejemplo, en la Bienal de Sevilla que se
supone, y lo es, el escaparate del flamenco, he asistido a
conciertos con dos filas de butacas, cuando el artista no
es muy popular, siempre refiriéndome a la guitarra, quiero
decir con esto, que la afición a la guitarra de concierto
no es tan grande. Sin embargo esta mejorando mucho. Creo que
cada vez existe mas interés. Tambien es cierto que hay muchos
mas medios y posibilidades, para conocer esta forma de expresion
flamenca.

No te molesta que en España
no se de el mismo tratamiento a la guitarra como en otros
países. En el Teatro Real, la Zarzuela, …

Lo que pasa es que cada sitio está hecho para una cosa
distinta, yo he tocado en el Teatro Real y en la Zarzuela
y se ha llenado, pero como conciertos extraordinarios, no
entras en el abono, es necesario alquilar el Teatro y depende
mucho de la empresa, ya son otros factores los que entran
ahí.

¿Qué festivales de
guitarra destacas?.

El de Córdoba naturalmente, la Bienal de Sevilla, el
de La Unión es muy bueno, estuve ya hace bastantes
años, y quizás el próximo año
estaré.

La guitarra no se está
parando, hay un montón de guitarristas, Vicente
Amigo toca como los ángeles, José A. Rodríguez
de Córdoba, Cañizares, Gerardo Núñez,

¿La guitarra tiene continuidad?,
¿de los guitarristas de ahora, quien destacas?

La guitarra no se está parando, hay un montón
de guitarristas, Vicente Amigo, toca como los ángeles,
José A. Rodríguez de Córdoba, Cañizares,
Gerardo Núñez, hay un montón de ellos
que tocan la guitarra para comérselos. Carlos Piñana,
que yo le dí el premio en el Festival de Córdoba.

¿Dentro del flamenco, quizás
es la guitarra lo que más ha evolucionado?

Si, y sin querer, la guitarra ha hecho evolucionar el cante,
enriqueces al cantaor, que se le van ocurriendo giros que
antes no tenían. Lo único que cantaores quedan
pocos, puros, se están todos comercializando, incluso
los que cantan bien, pero creo que las casa de discos les
fuerzan.

¿Ahora hay muchos discos
de guitarra solistas, aunque siempre meten cante?

Si, hay muchos discos, pero en muchos de ellos, hay demasiado
cante, no son totalmente de guitarra solista

¿Parece que es necesario?
No, nosotros hemos llegado sin eso, yo he metido algo de cante
en mi último disco, pero para ilustrar la guitarra,
letras que en una cuarteta indiquen el mensaje que quiero
llevar, pero nada más, el resto guitarra.

¿Y de la carrera discográfica,
estás fuera, es difícil ver tus discos en las
tiendas?

Bueno, yo tengo 16 discos, pero hace tiempo que no grabo,
también es cierto que Columbia -la casa de discos- desapareció
y no se encuentran los discos, pero ahí están. Ahora voy a
volver a grabar, dentro de muy poco, con la Fundación Autor,
van a salir varios discos. También voy a trabajar con Szena,
una empresa del grupo Telefónica, con la que tengo grandes
proyectos.

¿Acompañar al cante?
No, no es mi fuerte, ni tampoco mi objetivo, cuando yo lo
necesite lo haré. Aunque hace un par de meses acompañe a El
Yunque en su disco, me lo pidió un amigo y lo hago con mucho
gusto, pero como colaboración.

 

 

Rafael
Manjavacas Lara

 



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