Entrevista a Ojos de Brujo. Hip Hop flamenquillo

flamenco, pero de otra manera,
con letras actuales, y a la gente le gusta, tiene soniquete
y llega.
 
a mí me gustan muchas
letras antiguas que me parecen sentencias y quedarán
para siglos, pero hay muchas cosas de la actualidad
que no se plasman
 
Cuando dejas de pensar que
el flamenco es una música como las demás,
no es intocable, puedes jugar con ella y te das cuenta
de que el terreno es basto para investigar.
me gusta mucho el lenguaje
flamenco, intento escribir las letras como las digo,
de manera coloquial, popular, no las traduzco al lenguaje
escrito,
 
Diego Carrasco me gusta mucho,
él es compás, de lo mejor que se puede
escuchar, con unas letras alucinantes, me parece un
genio.
 
Por el talante
nuestro, por la forma de hacer coincidimos más
con ese público alternativo,
 
El concepto es retro-futurista,
como la música que nosotros hacemos, cogemos
cosas con mucha raíz y muy antigua como es el
flamenco pero con condimentos de ahora mismo.
 

Se ha definido a Ojos de Brujo
como un grupo de Hip Hop flamenquillo, que posee un
directo contundente, con un público alternativo muy
fiel, desde Cataluña han salido de gira “Abriendo Puertas”
para dar a conocer su música, en festivales de World
Music y otros han ido creando adeptos, pasando por Bélgica,
Francia y resto de España, en ningún sitio han pasado
desapercibidos, y es que quién tenga oídos y sobre todo
carezca de prejuicios se tiene que volcar con ellos
desde el primer tema.

Al escucharos por primera
vez, me recordó a Ea!, aunque cada grupo tiene su personalidad,
algún nexo en común debe existir.

MARINA. Sé que tenemos mucho público en
común, sobre todo en Andalucía, pues se oye
en muchos sitios donde he estado. Sé que hacen flamenco,
pero de otra manera, con letras actuales, y a la gente le
gusta, tiene soniquete y llega.

RAMON. Yo no los conocía, procuraré escucharles.

Te lo recomendamos, seguro que te gusta
su música.
La primera canción del disco es impactante, suena diferente
a todo lo escuchado. Definirme el estilo de música
que hacéis.

RAMON. No hay un estilo definido, todos llevamos un rollo
flamenco, pero hemos escuchado muchas cosas distintas y nuestro
estilo se va definiendo por ahí por la música
que nos ha gustado siempre y esas influencias las recogemos
a la hora de hacer música.
Hemos tocado siempre juntos y cada uno metía cosillas
de las que sabía hacer, cubano, colombiano, como en
el caso de Marina además del flamenco le gusta el Hip
Hop, el Fap, siempre lo que te gusta lo llevas a lo que haces.

Todas esas tendencias de ahora, chocan
frontalmente con el flamenco, ¿pero era necesario para
introducir esas letras que tenéis?

Marina. Sin duda el tema de las letras actuales y esas
músicas abre muchas puertas. Las letras sin duda marcan
una diferencia, en el flamenco lo de las letras no ha evolucionado
nada, a mí me gustan muchas letras antiguas que me
parecen sentencias y quedarán para siglos, pero hay
muchas cosas de la actualidad que no se plasman. No me veo
cantando una minera, pues yo no he vivido nada de eso, no
me pega, con la vida que he vivido tengo que expresar otras
cosas.

¿Pero la raíz flamenca
y el deje flamenco está presente en vuestra música?

Marina. A la hora de componer letras, sobre todo en el
Hip Hop, la letra es lo más importante, no solo que
rime y tenga estribillo, es una necesidad de expresar algo.
El soniquete y el fraseo flamenco también lo utilizo,
me gusta mucho el lenguaje flamenco, intento escribir las
letras como las digo, de manera coloquial, popular, no las
traduzco al lenguaje escrito, salen mas callejeras y creo
que en el flamenco ha sido así también.

En la canción 'Ná en la
nevera', haceis muchos cambios, dentro de la misma canción,
además cantais varios, cada uno con un ritmo distinto.

Ramón. En este tema comienza con una base de tanguillos
que se enganchan con una rumbita que se va poniendo cada vez
más calentita, más rápida y que acaban
con un subidón.

Marina. Además tiene una parte de batás
cubanos, de tanguillo y suena con un ambiente como de hogueras,
de brujas…

Utilizáis la rumba, los tanguillos,
para poner mucho ritmo.

Marina. La rumba tiene un carácter más callejero
y el tanguillo se presta mucho a rapear, es la bomba, y hay
rumbas y rumbas, que no es nada fácil hacerla bien,
además de donde venimos, mucho cuidado, que la rumba
catalana es sagrada.

¿Sois de allí de Cataluña?

Ramón. No te creas, si que hemos gestado allí
el grupo, allí nos hemos conocido, pero por ejemplo,
Marina es de Valencia.

Pero espíritu catalán si
que tiene el grupo.

Ramón. Se nota el sustrato de allí, es una
forma muy personal, y el deje, sobre todo en la rumba catalana
se nota.

Marina. Hay mucho respeto por la rumba, en otros sitios
la rumbas y el tanguillo son de menos peso, pero en Barcelona,
no te metas con la rumba, acabas mal. Oyes la guitarra de
Ramón, o la de Xavi y se te mueve el culete es que
té falta un tornillo, pues tiene un ritmo increíble.

Los estribillos los habéis rematao,
no es fácil hacer estribillos que lleguen.

Marina. Si claro, el estribillo da gusto, con estas rumbas
rapeás que hacemos los estribillos son muy importantes.

Vuestros conciertos le dais mucha importancia,
¿el directo lo vendéis más?

Ramón. De alguna manera pienso que son dos cosas
diferente, en el disco estás más preocupado
de que todo entre bien, de crear un ambiente… y un directo
es una fiesta, la gente te viene a ver y no sólo viene
a escuchar lo que toca , viene a pasárselo bien, se
integran en el concierto y se genera una química importante
con el público.

Hasta ahora sois desconocidos, pero tenéis
un público fiel, de alguna manera alternativo.

Marina: Nosotros estamos muy fuertes en Cataluña,
antes de sacar el disco ya habíamos actuado en todos
lados, nos ha visto un montón de gente.

Ramón. Hemos ido por toda Cataluña y al
hacer la presentación en La Paloma, se quedaron 400
personas en la puerta.

Pero ¿llegareis al gran
público?

Ramón. Es muy difícil, y tampoco es nuestro
objetivo, pero si es cierto que cuanto más gente lo
escuche mejor. Por el talante nuestro, por la forma de hacer
coincidimos más con ese público alternativo,
pero nunca se sabe, en cualquier momento puede surgir.

Os puede pasar lo que a Estopa.

Marina: No, no, no tiene nada que ver, con todos mis respetos,
si hubiera escuchado a Estopa en la plaza de Cornellá
con una guitarra me habían hecho gracia, pero como
están haciendo el disco y como lo están vendiendo,
me parece basurilla.

Y si os pasa, y empieza a sonar de forma
masiva, tendrías que cambiar muchas cosas.

Ramón y Marina. No, nosotros no,

Marina. No tenemos ningún prejuicio de que nuestra
música llegue a mucha gente, pero sin cambiar, siguiendo
nuestra línea, sin cambiar el concepto jamás.

Ramón: Si me dedico hacer esto es porque creo en
lo que estoy haciendo, en el momento que me digan que tenga
que hacer otra cosa que no creo, no lo haré, para ganar
dinero me pondré a hacer otras cosas.

¿Cuántos sois?

Ramón. Muchos, los que caben en el escenario, Ojos
de Brujo somos una base, 5 o 6 personas, bajista, guitarrista,
voz, cajón.. y formamos una piña el corazón
de la banda, aunque en los directos nos juntamos mas de 9
personas.

Este disco lo tenéis ya mas de
un año. ¿Costó mucho sacar el disco?.

Ramón. Nosotros nos encargamos de todo, de la
producción, del diseño de la carátula,
de todo el disco, … y además la discográfica
te marca un ritmo interesado que no coincide con el nuestro.

Marina. Los temas del disco, son ya de hace 3 años,
y ahora tocamos temas nuevos, pues si no te aburres.
El disco es una foto en un momento dado, pero el grupo sigue
haciendo cosas que obviamente van a un ritmo diferente al
discográfico.

La imagen de la portada, ¿es la
que queréis dar a Ojos de Brujo?, algo antiguo, como
si se tratara de músicos ambulantes.

Marina. Esta hecho en El Carmelo, una montaña de
Barcelona, que vivían mucho gitanos que los tirarón
de allí, de sus barraquillas. Allí hicimos un
graffiti de Rumba Dub Style que se puede ver en la portada,
que corresponde con el primer single que sacamos.

El concepto es retro-futurista, como la música
que nosotros hacemos, cogemos cosas con mucha raíz
y muy antigua como es el flamenco pero con condimentos de
ahora mismo.

Ramón: Contemporáneos.

Marina. Es como una foto de pueblo antiguo, con sus personajes,
con el borrachillo, el Ramón guitarrista, el noble,
el gitano bueno, otro parece El Cabrero, otro está
como el que se ha ido a Madrid y no le ha ido bien y se ha
vuelto. Otro que vende pocimas y botecitos…

¿Vais a grabar entonces
otro disco ya, para intentar alinear el directo con lo grabado?

Ramón. Todo tiene un proceso y si todo va bien,
en Febrero comenzaremos a grabar.

Ahora ¿estáis 'abriendo
puertas'?.

Ramón. Estamos llamando a todas las puertas,
Marina: ¿se puede?

La gira es muy larga, estáis recorriendo
España y parte de Europa.

Marina. En Granada fue un concierto brutal, mas de 600
personas y gente en la puerta, gente que se sabe las canciones
de lo que todavía no está grabado. De los directos,
hemos hecho mucho festival, en el Womad, en Bélgica,
en Pirineos, en Etnosur, …

¿Entráis en la ruta de
músicas del mundo, lo que se llama World Music?

Marina: Las dos pasitos que hemos dado en ese sentido
han ido muy bien, en el Womad fue maravilloso.

Ramón: En Bélgica, a la una de la tarde,
en la tercera canción estaban todos saltando, cuando
nos dijeron que si aplaudían nos diéramos por
contentos.

¿Cuál es tu historia,
en la música?

Ramón. Yo he tocado en Peñas para cantaores,
el tema de las rumbas me hizo ya montarme un grupillo, fui
derivando al Hip Hop, Breakdance, llegue a dejar la guitarra
de lado, funky, soul, en esa edad todo te gusta, monté
un grupillo de rock urbano, incluso me compré una guitarra
eléctrica, heavy, volví otra vez al flamenco…

Conociste a Marina…

Marina: Un flechazo.

Ramón. Una persona con las mismas influencias
que yo, pero por otro lado, con las mismas inquietudes y ganas
de investigar con el flamenco y el hip hop y todo lo demás,
era increíble.

Marina: Yo en Valencia no podía tocar con nadie,
iba a una peña de compás, de flamenco, pero
no me gustaba, el flamenco sí, pero no el ambiente,
estaba un poco reprimía. Un verano hice un cursillo
de cante en Elche muy entusiasmada y pase una semana fatal,
29 gitanos y yo, la paya, todos esperando a ver que hacía,
como voy a contar que me gusta el hip hop y rapear en la solea
por bulerías. Al final, mira, me junto con Ramón,
un gitano que me entiende.

Ramón. Hemos coincidido mucho en los gustos y
a la hora de componer, vamos todos en una misma dirección,
uno se emociona con lo que hace el otro y viceversa.

¿Respetáis el flamenco,
las bases?

Ramón. El primer criterio era desde el flamenco,
aportar cada uno su experiencia musical y nutrirnos de otras
cosas.

En el flamenco siempre hay mucho miedo.
Esos limites vosotros no los tenéis, pero aún
así con mucho respeto.

Marina: Hemos hecho un tema que es bosanova, fandango,
no se como llamarlo que tiene un compás de fandango,
pero que es como un viaje, va a compás de fandando
luego salta a soleá por bulerias, vuelve el fandango.

Ramón. Lo intentamos respetar, por que nos gusta,
y muchas cosas se van mimetizando en el flamenco sin forzarlas.
Cuando dejas de pensar que el flamenco es una música
como las demás, no es intocable, puedes jugar con ella
y te das cuenta de que el terreno es basto para investigar.

Marina: Tenemos una bulería, la bulería
del aire, muy rápida, funky y rapeada.

¿Qué os gusta, que
habéis escuchado de flamenco?.

Marina: Pata Negra es un grupo que ha bebido todo el mundo,
es la base, también los Tabletón un grupo muy
original y que siempre me ha gustado mucho.

Ramón: A mí me gustan mucho Los Activos,
le energía que tienen, esa forma de llevar el compás,
la percusión que llevan me gusta mucho.

Marina: Diego Carrasco me gusta mucho, él es compás,
de lo mejor que se puede escuchar, con unas letras alucinantes,
me parece un genio.

 

Texto y fotos: Rafael
Manjavacas Lara

 



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