Diego Carrasco – 'Mi ADN Flamenco'

 

DIEGO
CARRASCO

“En el flamenco el pasado era lindo, el presente está siendo lindo y el futuro lo veo muy lindo”

 

 

No hay duda de que los temas que componen el último disco de Diego Carrasco “Mi ADN Flamenco” tienen sus mismos genes. Cinco son recién nacidos, cuatro llevan su sangre, pero los ha tenido que adoptar de otros discos recopilatorios y uno, el Aserejé se puede decir que lo ha clonado, pero el experimento no ha salido igual que el original, su arte jerezano se ha metido por medio. Pero en algo se parecen todos, que tienen ese sonido genuinamente flamenco “made in Diego Carrasco”, que parte de la vertiente más tradicional del flamenco y lo lleva a su terreno personal, el más marchoso y moderno del género. Y de nuevo ha creado un trabajo digno de su especie.

Has sacado recientemente tu sexto disco “Mi ADN Flamenco”. ¿Contiene la esencia de Diego Carrasco?

– Ahora que están de moda todas las palabritas esas, el ADN es carne de mi carne. Quiero reflejar que es mi autenticidad, que es Diego Carrasco el que esta ahí.

“El ADN es carne de mi carne”

El primer tema, “Libertad”, es lo que se podría denominar flamenco comprometido ¿es algo que siempre te gusta tocar?

– Yo creo que sí, que era necesario pegar algún grito de alguna manera, aunque a mi no me gusta politizar al flamenco, creo que era necesario hacer algo así”

Y adaptarlo a los tiempos.

– ¡Estamos con los tiempos! Aunque yo tenga muchos añitos, estamos jóvenes de espíritu.

Has recuperado cuatro temas de otras grabaciones “Bailaores”, “Hello Dolly”, “Ratones Coloraos” y el tema “José Monje Cruz”, dedicado a Camarón.

– Creo que el disco lleva un contenido bastante equilibrado. Los demás temas nos parecían muy lindos y para hacer algo mejor que eso era complicado, también era una pena que estuvieran sueltos, tenía muchas ganas de que estuvieran juntos porque creo que los temas tienen la calidad y el prestigio que a mí me interesaba, y hacerle un homenaje a Camarón me parece a mí que está al día.

También hay una versión muy personal del Aserejé. ¿Qué te atrajo de este tema?

-¡Anda!, ¡échale aserejé!, ¡échale papas!, pues yo creo que el divertirte, que es algo importante. A mí me gusta mucho el compartir cosas con amigos, sobretodo cuando son grandes músicos. Es un tema que no hace falta que diga nada de él y nos hacía ilusión hacer nuestra versión muy jerezana, que era de lo que se trataba, y creo que ha quedado bastante bien.

“Creo que he tenido mucha suerte porque en algunos artículos he leído que me tratan bien los jóvenes y que me tratan bien los viejos, los ortodoxos y los revolucionarios”

Hay cinco temas nuevos como usualmente, reivindicativos de tu forma de entender la música.

– Creo que está dentro de mi línea, porque ahora de verdad que me estoy sorprendiendo, cuando me hablan de línea, que si llevamos una línea… Me gusta mucho el ADN, porque creo que sintetiza los demás trabajos y lo veo muy fresco y me parece que de momento hemos tenido buena acogida.

Con un sello tan personal, ¿cómo se hace para innovar y que lo nuevo que haces no parezca lo mismo que lo anterior?

-¡Anda!, cambia la hora que te tienes que ir ya. Aparentemente parece que es fácil, pero no, hay muchas horas detrás. Lo que sí es verdad es que al tener que hacer cosas para mí me cuesta menos trabajo que hacerlo para los demás.

 

¿Ha costado mucho que crítica y público se acostumbrara a tu estilo o que respetasen tu música?

– Al principio costó mucho más, de esto hace muchos años. También no daba claro las notas, porque creo que mis inquietudes me hacen hacer cosas diferentes. He pasado por varias fases. Empecé como guitarrista y luego me metí a hacer cosas de rock, empecé a montar coreografías y he hecho de todo un poco. Cuando ya hay solidez en el trabajo, estamos todos contentos y sobretodo el público. Creo que he tenido mucha suerte porque en algunos artículos he leído que me tratan bien los jóvenes y que me tratan bien los viejos, los ortodoxos y los revolucionarios. Creo que estamos en medio.

“Tú no puedes irte para atrás y hacer los festivales de antiguamente, de muchos artistas que ya te aburres y que sólo va un público especial”

Has roto moldes hasta estéticamente ¿por qué en épocas anteriores ver un flamenco con barba no era muy normal?

– Sí, eso sí, no te puedes imaginar. Me acuerdo de Lola Flores, pobrecita, me decía, pero ¡aféitate!, hombre, ¡aféitate!, ¿cómo se van a creer que eres gitano así?, ¿cómo se lo van a creer? ¡Aféitate!, pero en esa época te hablo fíjate… ¿A cuánto estamos hoy? Cerca de los 50 principales que estoy ya, hace treinta y pico de años, entonces era raro ver a un gitano tocando la guitarra en un tablao o en algún sitio con barba.

En el flamenco tocar, cantar, bailar no es muy dado. Dicen que Enrique Montoya era uno de los pocos que también lo hacía.

– Sí, Enrique Montoya un gran artista, tocaba la guitarra, bailaba, cantaba y hacia todo y componía muy bien. Me da mucha alegría que me lo hayas recordado, porque era un gran artista.

“Mis inquietudes me llevan a hacer varias cosas. Yo no puedo estar parado haciendo solamente una cosa”

¿Fue tu referente?

– No, sinceramente no. Creo que no tengo mucho que ver con otro tipo de gente. Yo no sé como calificarme. Soy el último en hacerlo, pero muchas veces aciertan cuando te denominan. No sé, te dicen el cantautor del flamenco, muchas veces me dicen elogios que me llenan.

Pero tus maestros tendrás…

– Mis maestros son más serios, más ortodoxos. Son los pilares del flamenco. Dentro de mi corazón siempre llevo a Tía Anica la Piriñaca, Terremoto, a Tío Borrico, el Serna, gente de este tipo, esos son mis pilares.

¿Cómo conservar lo antiguo y luego hacer temas frescos, se lleva dentro, investigando…?

– No te lo podría aclarar, la verdad. Lo que sí es verdad es que el flamenco esta muy vivo, si algo bonito tiene es lo vivo que está. Sobretodo una faceta importante es el tiempo, el pasado era lindo, el presente me parece que esta siendo muy lindo y el futuro lo veo muy lindo. Quiere decir que estas ahí, estas vivo, tampoco le doy muchas vueltas a las cosas, intento llevar la línea que quiere el publico y con dos pinceladitas, la gente me lo admite y yo soy feliz.

Siempre hay mucha controversia respecto a que los jóvenes no respetan lo antiguo, ¿crees que muchos ya se han quedado con esa copla, que hay algo de verdad?

– Cada persona es libre de pensar. Jueces ¿quién es juez de esto? El que sea juez que tire la primera piedra. Somos muchos y cada uno tiene sus gustos, lo que no sé puede es mezclar las cosas. Los Ketama por ejemplo, tienen una raíz enorme y si los escuchas la tienen y sin embargo son jóvenes, actuales y hacen una música, que es la que quieren.

Pero a pesar de que tú fusionas, te tienen siempre más dentro del flamenco que de lo que se puede denominar flamenkito o aflamencado.

– Creo que hay muchos años de trabajo y compartir con mucha gente, porque no creas que tú lo haces todo, es necesario estar abierto y esto es recíproco. Tú me das, yo te doy, tú aprendes de uno, yo de otro y eso es así. Es difícil que salga un genio de chiquitito y empiece a hacer cosas.

Dicen que hay muchos carrasquistas, ¿tienes una escuela importante?

– Eso es un montón de niños que tengo por ahí que les pongo el apellido. Tengo mucha suerte de tener muchos amigos, los carrasquistas.

“Tengo mucha suerte de tener muchos amigos, los carrasquistas”

Tino Di Geraldo, Tomasito, Curro Navajita, Raimundo…

– Allí estamos todos juntos, compartimos, porque hablar de Tino Di Geraldo… o de Tomasito, que es mas joven, somos familia, me trata como si fuera su tío. Y si es verdad que tenemos carrasquistas tenemos que decirles ahí estamos, creo que el título de este disco va por ahí.

Esta claro que piensas que los artistas flamencos tienen que atreverse a pisar otros territorios.

– Allí es donde estamos, hacerlo actuar, porque los mismos elementos que están ahí arriba, sirven para hacer muchos guisos. Poder escuchar a Susi un tema de Sting o escuchar a Carmen Linares cantar “Se equivocó la Paloma” o un tango argentino en la voz de un gran cantaor y luego se sientan y cantan por soleá. Creo que es lo que necesita el público. Tú no puedes irte para atrás y hacer los festivales de antiguamente, de muchos artistas que ya te aburres y que sólo va un público especial. Creo que hace falta abrirse y creo que este territorio va ir ganando más territorio y captando gente joven.

Has tardado mucho en volver a grabar, te lo piensas mucho. ¿Prefieres dedicarte más a la producción, la composición?

– A mí me gusta mucho el estudio y hemos tenido suerte de tener bastante trabajo. He estado mucho tiempo con Jesús Bola y hemos estado produciendo muchas cosas, haciendo muchos trabajos, muy interesantes y el estudio lleva muchas horas, no sabes cuando entras y cuando sales y te gustan las cosas y lo haces con gente que las comparte y que tiene la misma ilusión, y eso te lleva a no tener tiempo para hacer tus cosas. Luego empezamos a hacer un directo que también es muy lindo, el calor del directo. Así como el estudio es muy frío, el directo es muy caliente.

¿Te gusta mas tú faceta de compositor o de intérprete ?

– Hombre, me gusta mas la de ir a la ventanilla, me gusta la de la ventanilla. Soy así como soy y mis inquietudes me llevan a hacer varias cosas. Yo no puedo estar parado haciendo solamente una cosa, la bulería. Si yo tuviera que estar todo el rato con una guitarra delante de un espejo, estudiando para coger mucha técnica, me aburriría, tengo que hacer muchas cosas.

¿Qué proyectos tienes, parece que uno con Manuel Molina?

– Es un mano a mano que vamos a hacer en varios sitios. En Nimes y no sé si en Madrid, pero creo que va a ser muy bonito y me apetece muchísimo, porque para mi Manuel Molina es mi patriarca, ahí si me reflejo, en Manuel, de haber roto como rompió, abrió la veda y caminos y ahí vamos muchos.

¿Es tu proyecto más inmediato, tienes alguno más?

– Hay cosas bonitas. Me invitan a muchos espectáculos, estoy en varios sitios para ir a la Bienal de Sevilla con unos proyectos muy interesantes. También hay un proyecto que quieren hacer conmigo muy especial, que es hacer un ilusionista de flamenco, dentro de la chistera, sacando los pañuelos, o sea que nos vamos a divertir.

“El flamenco se va a abriendo camino. Ahora no se le está dando valor, pero mañana se le dará valor a lo que viene”

¿Es esta una época dorada del flamenco?

– Dorada me suena a otra cosa, a un restaurante muy lindo, la dorada [ se ríe ]. Yo creo que el flamenco está en muy buenas manos, está muy abierto, muy rico y los chavales que vienen jóvenes tienen capacidad y están muy bien preparados. El flamenco tiene una cosa compleja, que se va a abriendo camino. Ahora no se le está dando valor, pero mañana se le dará valor a lo que viene.

Más información:

Presentación Disco 'Mi ADN Flamenco' en Cardamomo (Madrid)

Reseña del disco – 'Mi ADN Flamenco'

Reseña Concierto
'Territorio Flamenco' – Teatro Lope de Vega (Madrid)

Texto: Sonia Martínez Pariente

 

Fotos: Rafael
Manjavacas

 



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